Manual para Laicos Franciscanos - Lección Décima Primera - La Espiritualidad Franciscana "Movimiento" de Conversión


1.- Algunos hechos de la historia
Muy allá al principio del movimiento franciscano, antes de que a los primeros seguidores de San Francisco se les dieran los nombres de “Hermanos menores” o “Frailes mendicantes” o “Franciscanos”, parece que el primer nombre que ellos mismos usaban para autodescribirse fue el de “Penitentes de Asís”.
San Francisco en su testamento recuerda los años de su conversión yn os describe todo aquel proceso interior y exterior con esta frase sintética: “El Señor me concedió a mí, Fray Francisco, el comenzar de este modo a hacer penitencia”.
El nombre de “Hermanas y Hermanos de Penitencia” siguió en uso dentro de la Orden Franciscana hasta hace poco, pero para designar exclusivamente los miembros de la Tercera Orden Secular o terciarios, hoy Franciscanos Seglares, y ya no a los Frailes Menores y a las Monjas Clarisas.
2.- Variedad de palabras y términos
La Palabra “Penitencia” tiene varios sinónimos, tanto en la Sagrada Escritura como en los Escritos de San Francisco: “Arrepentirse”, “convertirse”, “hacer penitencia”, “cambiar de pensamiento”.
Todas estas palabras significan lo mismo, más o menos. Hoy día está de moda usar la palabra “metanoia”, tomada del griego, para expresar siempre la misma idea. En esta Lección vamos a escoger la palabra “penitencia-conversión”, por ser usual e inteligente entre la gente común.
3.- Significado del término “penitencia-conversión”
Pero, ¿Qué significa, pues el término “penitencia-conversión” que constituye la clave, el punto de partida y la exigencia mayor de la vida franciscana?
Esta pregunta adquiere un interés muy especial si se tiene en cuenta que para San Francisco viene a ser la descripción más precisa y exacta del ser franciscano y por ahí debemos de pasar todos, si queremos ser auténticos seguidores suyos, seguidores de Cristo.
En primer lugar, hay que decir que el significado de este término no se puede restringir a los actos externos de mortificación, como los ayunos, la renuncia al dinero y al bien vestir, los cilicios, etc, etc.
Tampoco podemos reducir la “penitencia-conversión” a sólo un cambio de actitud interior como sería solamente un nuevo modo de pensar y de ver las cosas. No. Se trata de algo más. Cuando hablamos de “penitencia-conversión” se trata de un cambio total, tan íntimo que es capaz de transformar también la vida exterior.
Quizás se pueda expresar la idea diciendo que es una actitud de abandonarse a un Dios que tiene exigencias absolutas sobre el ser total del individuo. Exactamente lo que le sucedió a San Francisco. La conversión o cambio de San Francisco aparece unida a ciertos gestos exteriores: renuncia de apellido y herencia paterna, cambio de vestido, corte de pelo, etc.
4.- La conversión es una respuesta a la obra de la salvación de Dios.
San Francisco habla de la conversión o vida de penitencia en el capítulo 23 de la Regla no bulada. Esto es muy significativo. Todo el capítulo 23 es un bellísimo canto de acción de gracias a Dios Trino por la obra de la Encarnación. Con esto quiso San Francisco darnos a entender, por lo menos, dos cosas:
La conversión o penitencia no es fruto exclusivo de la buena voluntad del individuo sino sobre todo de Dios. “No es del que quiere ni del que corre, sino de Dios, que tiene misericordia” (Rom. 9m 16). El comienzo de la vida de penitencia no se encuentra en el hombre sino en Dios. Pero, de esto hablaremos en la próxima lección al tratar de los carismas.
San Francisco quiere agradecer a Dios la obra maravillosa de la Encarnación, por medio de su vida de penitencia, por medio de su conversión. La conversión, entonces, no es otra cosa que la aceptación y respuesta agradecida del hombre al llamado de la salvación: dejarse llevar totalmente por la obra santificadora que Dios por medio de Cristo, realiza en su Iglesia.
La vida de penitencia y de conversión es dejarse penetrar por la obra de salvación que Dios opera en el mundo. Dejarse llevar por la obra que Dios lleva a cabo en la creación, en la redención y en el perfeccionamiento del hombre por medio de Cristo.
5.- La conversión, condición para entrar en el Reino de Dios
El llamado a la conversión lanzado por San Juan Bautista: “Convertíos, porque el reino de Dios está cercano” (Mt 3, 2), adquiere toda su actualidad en San Francisco. Nuestro Padre lo repite con sus palabras y con su ejemplo.
Sentía profundamente la urgencia de ese llamado y la necesidad de que el reino de Dios se estableciera en el mundo.
El reino de Dios no debe entenderse como un territorio o un sistema político o un Estado, sino un modo peculiar de vivir en el que se observa y se vive con tanta plenitud la justicia y el Santo Evangelio que se puede afirmar que Dios está reinando. Es el plan que Dios, Creador y Padre se ha formado para regir al mundo y que al ser observado por los hombres resplandece como un reino.
La conversión es sólo el principio de la nueva vida. Es la puerta de entrada al reino de Dios. Muertos al pecado u convertidos en criaturas nuevas, debemos de vivir conforme a las bienaventuranzas que son la máxima expresión del reino de Dios.
Debemos de regular nuestra vida de acuerdo al Evangelio; de acuerdo a las enseñanzas y a la vida de Jesucristo Señor nuestro.
La verdadera conversión produce una alegría y un estado de ánimo difíciles de describir con palabras.
San Francisco, tratando de descubrir su experiencia personal, nos dice que lo que antes le parecía amargo se le convirtió en dulzura del alma y del cuerpo. Con razón las parábolas evangélicas comparan la alegría de la conversión con la de un hallazgo. Como la de quien encuentra un tesoro escondido o una perla preciosa.
CUESTIONARIO
1.- ¿Cómo se autollamaban los primeros franciscanos y con qué palabras comienza San Francisco su Testamento?
2.- ¿Qué significa, en última instancia, el término “penitencia-conversión”?
3.- ¿Qué se entiende por Reino de Dios?
Tomado de:
Espiritualidad de San Francisco de Asís
Manual para Laicos Franciscanos
P. Cornelio Moya OFM
Zapopan, Jalisco
1977
10:15:00 a.m.

Publicar un comentario

[facebook][blogger]

Hermanos Franciscanos

Formulario de contacto

Nombre

Correo electrónico *

Mensaje *

Con tecnología de Blogger.
Javascript DisablePlease Enable Javascript To See All Widget